Calidad

Del agua de lluvia y del deshielo que alimenta los afluentes del río Silvermine; a lo largo de los arroyos que llegan a nuestras cuencas y se acumulan en nuestros embalses limpios y bien mantenidos; en el agua dulce y cruda que canalizamos hacia nuestras instalaciones de purificación y tratamiento; y después, a lo largo de las resistentes líneas de agua que conducen a cada hogar en nuestra área de servicio, somos su fuente de agua. Y nos preocupamos por proporcionar agua de calidad.

Para la mayoría de las personas, la calidad del agua comienza y termina en el hogar, en el grifo, y significa un vaso lleno de agua clara, sin olores y con un sabor fresco. Pero en el FDWD, la calidad del agua significa mucho más que eso. Significa cumplimiento estricto y aplicación de las regulaciones locales, estatales y federales que protegen nuestro suministro de agua a lo largo de su recorrido, desde las gotas de lluvia hasta el grifo del hogar. Significa realizar pruebas diligentes del agua extraída de nuestras fuentes; patrullaje dedicado de nuestra cuenca; mantenimiento regular de equipos e instalaciones; procedimientos exhaustivos de procesamiento de agua; y finalmente, entregarle ese vaso de agua limpia, clara y pura.

El estado de Connecticut y el gobierno de los Estados Unidos exigen pautas estrictas y políticas de prueba estrictas con respecto a la calidad del agua, y durante las pruebas anuales de calidad del agua, el FDWD cumple y supera consistentemente estos estándares.

Además de las inspecciones y pruebas gubernamentales, nuestros operadores de tratamiento de agua visitan periódicamente las propiedades en nuestra cuenca y realizan estudios sanitarios en cada ubicación. Estos estudios garantizan que fluyan aguas seguras de todas nuestras fuentes. La protección en la fuente tiene que ver con la calidad del agua.