En realidad, es una ecuación simple: un ambiente limpio equivale a agua limpia. Como parte del proyecto de proporcionar agua limpia, clara y pura al público, se nos han confiado terrenos y embalses que requieren supervisión.

Esta supervisión, nuestra administración, se puede describir en tres palabras: inspecciones, protecciones y mitigación. Al implementar este esfuerzo triple, el FDWD puede asegurar al público que nuestras tierras y vías fluviales están bien protegidas y que el agua que suministramos está libre de contaminación.

Y esa es nuestra misión: patrullaje diligente y protección de las tierras dentro de nuestra cuenca, análisis escrupulosos de todas las aguas que drenan en nuestra cuenca y eliminación rápida de cualquier posible contaminante en nuestro suelo y agua. Patrullamos nuestra cuenca diariamente y trabajamos estrechamente con los departamentos de policía locales y otras autoridades para inspeccionar las áreas que drenan en nuestros embalses, investigando cualquier posible peligro para el suministro de agua antes de que puedan ingresar a nuestro sistema. Analizamos periódicamente el agua extraída de nuestros embalses y pozos, asegurando que toda el agua que fluye de nuestras fuentes permanezca limpia, saludable y pura. Además, el FDWD actúa como un firme defensor del desarrollo seguro y sostenible en todas las áreas cercanas a nuestra cuenca. En total, el FDWD administra más de diez millas cuadradas de tierras de cuencas en el área occidental de Connecticut y el este de Nueva York: tierras y vías fluviales que requieren nuestra protección dedicada, y también la suya.

Recuerde utilizar productos químicos de jardinería como fertilizantes y pesticidas a la ligera y con cuidado, ya que pueden filtrarse a nuestro suministro de agua. Además, considere utilizar soluciones orgánicas alternativas en sus jardines y patios. Deseche siempre el aceite de motor y otros productos químicos domésticos peligrosos en un sitio de recolección aprobado por el estado o durante la recolección de desechos peligrosos. Además, mantenga sus sistemas sépticos adecuadamente: vacíelos a intervalos regulares y verifique si hay filtraciones. Y, si ve alguna evidencia de vertido ilegal o peligroso cerca de una cuenca, infórmenos a nosotros y a las autoridades locales. Recuerde, el público es una parte integral de nuestro intento de proteger el medio ambiente y nuestros recursos naturales.